En el XI Curso de VMNI en la Insuficiencia Respiratoria Aguda 2019, celebrado en Valencia, se han revisado técnicas, dispositivos y tratamientos relacionados con la VMNI, a la vez que se han actualizado conceptos y se han presentado novedades que pueden suponer grandes cambios en ventilación y en los sistemas de presión positiva continua en las vías respiratorias (CPAP).

El doctor Alejandro Albert, del servicio de Urgencias y Emergencias del Hospital General Universitario de Alicante y miembro del grupo Área VMNI, presentó en la ponencia Sistemas de CPAP no mecánicos. Alto flujo los retos a los que se enfrentan los Sistemas de Presión Positiva Continua (CPAP) para mejorar la práctica para el profesional que la utiliza y para dar el máximo confort al paciente.

Tal y como explicó, estos retos fueron identificados en el artículo A systematic technical review of the systems for the continuous positive airway pressure, publicado en 2012 en la revista Minerva Médica y liderado por el doctor Antonio Esquinas. Los autores identificaron tres problemas comunes a todos los sistemas de CPAP:

1. El ruido que se producía al generarse la válvula virtual podía ser molesto e incómodo para pacientes, familiares y profesionales, especialmente en Unidades de Cuidados Intensivos.
2. La falta de humidificación convertía este tratamiento de VMNI en un tratamiento incómodo y molesto para el paciente. Esto se debe a la sequedad que provocaba en la cavidad bucal y limitaba el tiempo que se podía mantener el tratamiento en marcha.
3. La falta de monitorización hacía que los doctores no pudieran analizar y regular presión, volumen y flujo en el paciente. Se trataba de un sistema que obligaba a los facultativos a trabajar “a ciegas” y esto resultaba en tratamientos menos eficientes.

Soluciones para los retos a los que se enfrentan los sistemas de Presión Positiva Continua

Desde que se escribió el artículo en el año 2012 han aparecido distintos dispositivos y avances tecnológicos que ayudan a superar los tres principales retos identificados en los sistemas de CPAP. En el caso de la CPAP de Boussignac, hoy en día existen posibilidades para mejorar el confort y el descanso de los pacientes, obtener datos que mejoren la eficacia del tratamiento y mejorar el rendimiento del proceso:

1. La solución para limitar el ruido provocado por el aire en los sistemas de CPAP ha sido la creación de un silenciador. Este se introduce en el extremo distal de la válvula y provoca que las partículas de aire al girar y comprimirse en la válvula virtual, choquen contra este nuevo dispositivo y el ruido quede silenciado dentro de la propia válvula.

La reducción del ruido ha supuesto una importante mejora en el confort para el paciente.

2. Hoy en día y tras unos años sin una solución útil, existe una manera de humidificar y calentar de forma activa y eficiente el gas utilizado durante el tratamiento con CPAP de Boussignac. Con un tubo cilíndrico de 22 mm de diámetro distal y proximal, se adapta la válvula a uno de los puertos del dispositivo diseñado para solucionar este problema, un humidificador.
   Sin embargo, al añadir este dispositivo, el sistema deja de ser abierto, por lo que será necesario colocar un puerto espiratorio entre el extremo distal de la tubuladura utilizada con el humidificador. Es decir, un dispositivo que haga las funciones de “agujero espiratorio”. Esta solución permite utilizar la CPAP durante periodos más prolongados se adapta a las distintas mascarillas recomendadas.

La humidificación mejora el rendimiento de la ventilación para paciente y médico y el confort del paciente.

3. Por último, nos enfrentamos al problema de la monitorización.
   • Tras varios años de investigación, la CPAP de Boussignac incluyó un manómetro que permite medir la presión del aire de forma analógica.
   • Además, algunas investigaciones recientes llevadas a cabo por el Grupo de Ventilación Mecánica No Invasiva liderado por el doctor José Miguel Alonso, han llevado al diseño del prototipo de un dispositivo completamente digital que permite monitorizar la onda de presión pero también las de volumen y flujo, dando al facultativo mucha más información sobre la efectividad del tratamiento sobre el paciente.

Los avances en la monitorización del tratamiento facilitan un seguimiento mucho más eficaz por parte del profesional sanitario.

El foco de la investigación tanto de profesionales sanitarios como de ingenieros, se ha centrado en los últimos años en resolver estos retos históricos a los que hacían frente los sistemas de CPAP y la evolución desde el 2012 marca un camino de optimismo sobre el futuro de la VMNI, que está en constante cambio para favorecer la comodidad y la mejora en el paciente, y el conocimiento en el profesional sanitario.

Si quieres saber más acerca de los 3 retos a los que se enfrentan los sistemas de Presión Positiva Continua o sus soluciones, rellena el formulario con tus datos y dudas e intentaremos ayudarte a resolverlas.

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