Seamos conscientes de lo agotador que resulta buscar un trabajo: horas mejorando tu currículum, días preparando la entrevista y semanas repasando tu discurso de motivación para impresionar a tu nuevo jefe. Y ahora, ¿qué? Ahora que conseguiste el trabajo, llega tu primer día… Por eso cuidamos mucho el proceso de onboarding de nuestros empleados.
La mayoría recordamos el primer día en un nuevo trabajo por la presión que sentíamos, la ansiedad del momento, la incertidumbre… Llegas lleno de expectativas que pueden convertirse en frustraciones y prejuicios sobre el funcionamiento de la empresa que luego son difíciles de modificar.
Conscientes de estos sentimientos, en Vygon hemos desarrollado un plan de acogida u onboarding que intenta reducir estas emociones negativas y transformarlas en emociones positivas y recuerdos imborrables. Las primeras impresiones son importantes.
El proceso de selección
Desde que llegas al proceso de selección queremos que seas tú mismo, que te sientas único y en confianza para sacar lo mejor de ti. La sorpresa de ser convocados a tomar café en un entorno diferente y con el CEO de la compañía ya crea ese pequeño momento único. Sin darte cuenta vas a compartir vivencias y tu nivel de estrés disminuye. Después pasas a vivir con tus compañeros una experiencia de juego en grupo que te lleva poco a poco a sentirte mucho más cómodo.
Una vez roto el hielo – y bien roto, durante al menos 2 horas jugando –, nos trasladamos a nuestro edificio Optimista para hacer una visita guiada y explicar a los candidatos nuestro modelo de gestión, ya que para nosotros es vital comprender la organización y los ¿Para qués? que nos mueven.
Tras la visita iniciamos un proceso de trabajo en grupos con diferentes temas a tratar, una conversación de trabajo todos juntos, y después, una comida con varias personas de la empresa para terminar con la normalmente temida entrevista individual entrada la tarde.
Sin embargo, tras una jornada como esta, pocos candidatos se quedan indiferentes y el momento de la entrevista se suele convertir en una agradable charla entre personas que ya se conocen. Pase lo que pase después, sabemos que, sin duda, no nos olvidarán.
Primer día: LA fiesta
Cuando por fin un candidato ha sido seleccionado, le organizamos un recibimiento por todo lo alto: confeti, globos, juegos, un almuerzo con todo el equipo… La idea es conseguir que el recién llegado que se siente como “el nuevo/a” se relaje y sonría. Queremos que se deje llevar y entre en la dinámica de los Vygoneitors.
Después le acompañamos en una visita por las instalaciones y hacemos las presentaciones. Le explicamos quién está a cargo de qué, qué equipos trabajan en común, quién le va a poder ayudar en las diferentes tareas…
Este es el momento apropiado para mostrar que trabajamos con “urgencia y sin estrés”. Estamos relajados, podemos caminar con nuestra taza de café, contar bromas o comentar el titular de negocios más importante del día con otro compañero, y aun así, trabajamos bien, de hecho, mejor.
Si te muestras como alguien amigable y cercano desde el principio, comenzarás con el pie derecho a la hora de generar confianza. Todos queremos trabajar con personas entusiastas y positivas. La actitud del nuevo compañero es mucho más visible en este momento, ya que nadie ha tenido la oportunidad de evaluar sus habilidades aún.
Onboarding, una labor de equipo
No queremos que nadie diga “no sabía ni dónde sentarme”, “nadie me ha explicado mi trabajo porque el jefe estaba de viaje”o “no he podido hacer nada, porque no tenía acceso al sistema”.
Estas son frases de una primera jornada de trabajo que todos hemos oído. En Vygon somos cada día más conscientes de la importancia de cuidar esa primera impresión. Es lo que se llama onboarding, técnica que disminuye la rotación de personal, mejora la productividad y reduce el coste de sustitución de un empleado, que según se calcula, triplica el sueldo del trabajador sustituido.
La función del mánager directo en este proceso de onboarding es vital. Va a ser su responsable más cercano, por lo que debe ayudarle durante todo el proceso, de hecho, será la persona que le guie a través del edificio ese primer día, en compañía de la responsable de Felicidad en el trabajo, visitaran todos y cada uno de los compañeros y puestos de trabajo.
Somos conscientes de la necesidad de concurrencia de otros departamentos de la empresa. Administración será el área encargada de la domiciliación de la nómina; Servicios Generales se ocupará de que su puesto de trabajo esté en las condiciones idóneas; y el Responsable de Sistemas informáticos, de la operativa de los equipos, claves de acceso a los soportes internos y el buen funcionamiento de las comunicaciones.
El objetivo es facilitar la integración del nuevo colaborador en el equipo y el modelo de trabajo de la empresa, lo que no se suele conseguir sentándole a trabajar desde el primer momento sin unas orientaciones mínimas.
Las empresas deben definir el modelo de acogida apropiado a su sector y filosofía. Los procesos deben ser flexibles y adaptados a la peculiaridad de la persona y el puesto: como no hay dos personas iguales, no hay dos procesos de acogida idénticos.
Si quieres presentarnos tus ideas o saber más sobre el tema del onboarding, ponte en contacto con nosotros:
0 comentarios