Comprobación de la punta del midline: uso de la ecografía

Por Pau López Guardiola

25 Jul, 2024

El uso de la ecografía para la verificación de la ubicación de la punta del catéter midline es esencial para garantizar su correcta posición y funcionamiento. Los midlines, fabricados en poliuretano de tercera generación, son catéteres de 20 a 25 cm que se insertan ecoguiados, generalmente en la vena axilar o subclavia. Este artículo explora la importancia de la ecografía en la comprobación de la punta del midline, apoyado por la evidencia científica y las recomendaciones clínicas. 

Características del Midline 

Los catéteres midline se utilizan ampliamente en la práctica clínica debido a su resistencia y capacidad para soportar altas presiones. Se insertan mediante técnicas ecoguiadas, que permiten una colocación precisa y segura. La punta del midline suele ubicarse en el tramo torácico de la vena axilar o, en algunos casos, en la vena subclavia, lo que puede generar debate sobre la ubicación ideal debido a los riesgos asociados con el malposicionamiento. 

Evidencia Científica y Controversias 

La evidencia científica nos dice que este tipo de catéteres deben tener la punta en una región intratorácica, aunque hay controversia sobre si debe quedar en la zona de la vena axilar o de la subclavia, ya que se ha visto que en función de la zona en la que esté, puede incrementar los síntomas de malposicionamiento del catéter; por ello es importante que la punta quede ubicada en una zona más delimitada. 

En lo que se refiere a la localización mediante ecografía de la punta del midline, la evidencia científica nos dice que la posición ideal en términos de reducción de riesgo de trombosis debería estar dentro de la vena axilar, ya sea en la parte distal de la unión entre la subclavia y axilar (evitando la transición entre las dos) o dentro de la vena subclavia, proximal al área de transición. El incide en la importancia de eliminar la práctica de dejar la punta entre la vena cefálica y la axiliar torácica. 

Las recomendaciones del grupo WoCoVA sugieren realizar un mapeo venoso antes de la inserción del catéter en pacientes con riesgo de trombosis para asegurar que la retirada será segura. Además, en casos de dificultad en la retirada, se recomienda una exploración ecográfica para identificar posibles trombos. 

Otro punto que señala la evidencia científica es que se deben evitar zonas próximas a la clavícula y a la primera costilla por el riesgo del síndrome de pinch off (pinzamiento o compresión del catéter) que se puede producir. 

Cómo utilizar la ecografía en la localización de la punta del midline 

La ecografía es una herramienta crucial en tres momentos clave del proceso de inserción y monitoreo del midline: 

  • Previo a la inserción. Valoración previa, método RaPeVA para evaluar la integridad de las venas o la posible presencia de trombosis instaurada. 
  • Durante la inserción. Tip navigation, seguimiento de la navegación de la punta durante el procedimiento de inserción para comprobar que sigue el recorrido adecuado. 
  • Tras la inserción, ya sea para la localización de la punta (tip location) del midline o para un control tardío de complicaciones (trombosis asintomática). Como la ecografía es inocua, conviene controlar rutinario. 

Procedimiento para Localizar la Punta del Midline mediante Ecografía 

Para localizar la punta del midline, se siguen los pasos del método RaPeVA en la región torácica: 

  • Posicionar el Transductor: Colocar el transductor por debajo de la clavícula, sobre el músculo pectoral. 
  • Visualizar la Unión de Venas: La ecografía debe mostrar la unión entre la vena cefálica y la axilar. 
  • Identificar el Catéter: Buscar la imagen del catéter dentro de estas venas. 
  • Orientar el Transductor: Orientar la sonda hacia la base de la clavícula, inclinándola hacia la cara del paciente y manteniendo un abordaje supraclavicular. 

La ecografía es una herramienta indispensable para la correcta inserción y monitoreo del catéter midline. Su uso en las diferentes etapas del procedimiento asegura la colocación adecuada de la punta del catéter, minimizando riesgos y complicaciones. Al seguir las recomendaciones y procedimientos basados en la evidencia, se mejora la seguridad y eficacia del tratamiento, proporcionando una mejor atención a los pacientes. 

Pau López Guardiola

Enfermero de UCIP y experto en acceso vascular pediátrico

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