El Dr. Paco Escribá trabaja como anestesiólogo en el Hospital Universitari i Politècnic La Fe. Entre los muchos proyectos en los que participa, encabeza el nuevo protocolo ERAS en anestesiología pediátrica en su hospital.

Un proyecto novedoso que busca dar soporte a los pacientes oncológicos en nutrición, preparación física y apoyo psicológico, con fin de acortar y mejorar el tiempo de recuperación.

En esta entrevista hablamos sobre este protocolo y temas relacionados con una buena gestión de las tres fases por las que pasa el paciente: preoperatorio, intraoperatorio y postoperatorio.

Puedes ver la entrevista completa este enlace.

Los protocolos ERAS (Enhanced Recovery After Surgery) tiene su origen en la década de los 90, cuando dos grupos de investigadores presentaron diferentes propuestas con el fin de mejorar la evolución postoperatoria de los pacientes intervenidos en una cirugía.

La implementación de estos protocolos permite disminuir los tiempos de hospitalización y de recuperación, así como posibles complicaciones y costes derivados de una recuperación más prolongada.

Persiguen una amalgama de maniobras y de gestos, como un checklist, que se hace sobre el paciente, tanto en el preoperatorio, como intraoperatorio y postoperatorio que parte de la medicina basal en la evidencia, y con fuertes recomendaciones de grupos de expertos. Trata de conseguir la mejor recuperación del paciente, disminuir las complicaciones mayores y menores, y disminuir los tiempos de ingreso

El Dr. Escribá también nos habla de la prehabilitación, un nuevo enfoque en el manejo preoperatorio de los pacientes quirúrgicos que ha demostrado una mejoría en la recuperación de estos.

A pesar, de estar muy relacionada con los protocolos ERAS y estar incluida normalmente en estos proyectos, no son exactamente lo mismo.

La prehabilitación consiste en un acompañamiento individualizado, adaptado a la capacidad funcional de cada paciente que incluye la realización de ejercicio físico, nutrición adecuada y apoyo psicológico.

La prehabilitación no es solo optimizar al paciente, consiste en estudiar su condición vital y hacer una serie de maniobras basadas en diferentes enfoques para mejorar su optimización desde el punto de vista de su salud, el paciente tiene que ser el luchador y el protagonista.

El paciente tiene un rol activo, tiene cosas que hacer para llegar de la mejor manera posible a la intervención, en este caso hay un empoderamiento importante del paciente.

A pesar de que ya existían muchos proyectos con muy buenos resultados en adultos, en pediatría todavía no se había adaptado ningún protocolo similar.

Un día, Aitana, antigua residente en el servicio de Anestesiología Pediátrica del Hospital Universitari i Politècnic La Fe, lazó una pregunta al Dr. Paco Escribá “¿esto no se podría adaptar también a pediatría?”.

Una pregunta que despertó el interés del doctor y que le llevó a seguir investigando. Hasta que encontró protocolos que se podían adaptar a pediatría.

A partir de ahí construyeron un proyecto que permite:

Convertir a estos pacientes en héroes, que se sientan importantes, protagonistas, como deportistas de élite, con su preparador físico, su nutricionista, su coach personal… y que vayan a jugar el partido de sus vidas en las mejores condiciones posibles.

Este proyecto está presente en todas las fases por las que pasa el paciente: preoperatorio, intraoperatorio y postoperatorio. Un tratamiento integral que permite una recuperación mejor y más rápida.

Durante la entrevista hablamos de estas tres fases, teniendo la oportunidad de tratar temas técnicos como la terapia guiada por objetivos, los parámetros hemodinámicos más habituales, así como la importancia de medir en todo momento qué sucede en el organismo del paciente, controlando por ejemplo el ácido láctico, relacionado con el índice de supervivencia.

Puedes ver aquí la entrevista completa: